El paso de nuestra sociedad industrial a la tecnológica, y los nuevos retos de nuestro tiempo tanto económicos como sociales y ambientales han provocado un cambio en los valores sociales que ha repercutido en conceptos como solidaridad, compromiso, colaboración, participación…

A todo ello, habrá que añadir la incorporación en los últimos 15 años de nuevos vecinos/as a nuestros barrios, en su mayoría, procedentes de diferentes países europeos, americanos, africanos e incluso asiáticos, ha hecho tambalear otros conceptos como “vecindad” e “integración”.

Si a esto le añadimos la situación acarreada por la pandemia provocada por el Covid 19 y las consecuencias que acarreará para los más jóvenes, el panorama de futuro se presenta complicado, y necesitará de propuestas y apoyos.

Vivimos en un país democrático que necesita que nuestros jóvenes, los actores y protagonista del futuro inmediato, se impliquen, desde su infancia, en el compromiso social y los valores democráticos para conseguir afianzar todos estos conceptos.

En una sociedad donde lo que prima es el individualismo, “la cultura asamblearia” tiene un valor intrínseco, la empatía. Un ámbito donde lo que predomina es “pido la palabra”, el valor educativo del debate con el grupo, el desarrollo de la competencia social y el sentido de reciprocidad. Supone un espacio de diálogo, de escucha, de expresión oral y, a la vez, un instrumento para desarrollar el respeto a las diferencias, el trabajo cooperativo y la ayuda mutua. Su propia organización supone un tipo de moral donde la cooperación es fundamental.

El objetivo último es educar en los fines, así como en lo que tiene valor en sí, hacer a los jóvenes alumnos/as capaces de analizar y seleccionar fines. Y al mismo tiempo dotarles de los instrumentos que les permitan intervenir sobre sí mismos y tratarse a sí mismo como fin. Convivir es algo más que tolerar. Se trata de creer que realmente es posible vivir juntos, abrirse a los demás sin miedo, sin renunciar a lo que uno es, pero buscando y aceptando las posibilidades que los demás plantean u ofrecen.

Uno de los elementos capaces de vertebrar un espacio y dotarlo de conciencia de comunidad son los medios de comunicación fácilmente accesibles para las personas de ese territorio. El acceso inmediato a noticias culturares y sociales, que tienen que ver con la Juventud, ayuda a crear una identidad comunitaria que se traduce en la mejora de la convivencia y en un estrechamiento de lazos entre los distintos colectivos integrados en dicha zona.

En el colectivo de los jóvenes, factor importante para el futuro del Distrito Las Fuentes ocurre, que a pesar de los diferentes medios que tienen a su alcance, no disponen de elementos propios y dirigidos a ellos que les permitan comunicar y ser informados de la realidad del barrio donde viven.

Esto provoca un desapego a la propia comunidad en donde viven y a la larga a muchos de ellos no les supone ningún reparo abandonar el barrio, provocando un progresivo envejecimiento de la población residente. Además, hay un claro déficit en la utilización de las redes sociales de forma responsable, segura y crítica, de manera que los jóvenes pueden caer en el uso de contenidos no apropiados, cuando no malintencionados, sin tener la necesaria preparación para distinguir entre dichos contenidos y aquellos que les aportan una información veraz y útil frente a sus necesidades.

De igual modo, la participación joven en el barrio de las Fuentes es meramente testimonial y apenas se produce. Sin embargo, cuando hay actividades específicas, para ellos, se acercan interesados, y este hecho lleva a pensar que no se trata de desapego estricto, sino de una falta de conocimiento y de oportunidades para ejercer una participación activa y constructiva.

De ahí, es por lo que se plantea la creación de un portal digital que aglutine a un amplio sector joven, con noticias y actividades de las Fuentes y una serie de actividades y programas que impliquen a la juventud del distrito en la vida asociativa y política de nuestra comunidad.

Además, no podemos dejar de señalar que la realidad de Las Fuentes presenta unas peculiaridades que deben ser tenidas en cuenta. El aumento de la población inmigrante es visible en nuestros centros escolares, donde la convivencia es buena, sin embargo, cuando las/os jóvenes llegan al instituto se separan, y chicas y chicos de distintos orígenes que eran amigos no se relacionan y hay muy poca identificación con el Distrito lo que hace que se pierda la voluntad de participación.

Desde la RED LASFU creemos necesario trabajar para que los/as jóvenes se integren en la vida diaria de nuestra comunidad, aportando sus propias iniciativas y soluciones a los problemas del barrio, dotándolos de medios para que puedan comunicarse entre sí y con el resto de la ciudadanía.

Asociación CIVITAS Vecinos barrio Las Fuentes

LAS AGUADORAS Las Fuentes

FACU

Asociación RIOS LAS FUENTES