Desde que se pasó la crisis del 2008, y cuando parecía que se respiraba esta crisis que ya lleva instalada entre nosotros ha arrasado con el estado del bienestar y los datos son escalofriantes.

El 23,74 % de la población española, 47.332.614 personas, está en exclusión social grave lo que supone 11.236.763 personas.

Del 40, 70 % de la población que tiene trabajos un 27% se encuentra en el concepto de “pobreza” de la clase trabajadora y está a puertas de la exclusión social y eso supone una cantidad de 12.779.806 personas.

Un 11,20 %  , a pesar de ser trabajadora se le considera  como clase baja , 5.301.253  personas y aunque llegan a fin de mes a duras penas sobreviven con serias dificultades.

El dato escalofriante es que 29.317.822 personas, ciudadanos, un 62 % de la población española se encuentra en la exclusión social y en los umbrales  de la pobreza.

Solo un 0,3 % se encuentra dentro la clase más alta o lo que es lo mismo 141.997 personas y de clase media-alta el montante sube a un 4,2 % 2.129.967 personas.

La realidad es que sólo un 33,5 % se encuentra dentro de la clase media con su división clase media- media un 16,59 %  ( 7.852.481) y  16,91 % (9.423.924) media-baja.

La realidad es que la clase media en España solo son 17.276.404 personas .

Conclusión la desigualdad es claramente manifiesta y que , según datos de las últimas votaciones de las Elecciones Generales de 2019 en la que se pudieron contar con poco más de 20 millones de votos .

Datos que coinciden son la clase media y el voto. Este situación genera un gravísimo problema a la democracia además de problema social y económico que se vive.

Desde FACU se solicita que se busquen soluciones consensuadas para revertir está gravísima situación que no se vivía desde hace más de 80 años en España.